Hace una semana empezó por estas tierras un festival jipioso (hippie oso para los que gusten leer in english). Se llama Festival Ollin Kan de las Culturas en Resistencia. Más jípi impossible!!!
Tiene la virtud de traer músicos de todas partes del globo y además es gratis. A veces traen gente que dice ser de un país pero lleva 40 años viviendo en otro... todo bien, pero bueno. Alguien conoce a Mínimo Garay??? Es argentino, vive en Francia y toca candombe y zambas!!! Pudiendo traer a Arbolito che! O al Chango Spaciuk ... me explico???
Hace exactamente dos años, gracias a mi profesionalismo (entiendase como: romper reiterada y alevosamente las pelo...) llegó a México por primera vez una murga uruguaya. Ya lo conté y sepan disculpar si aburro con el tema pero para mi fue toooodo un logro. Cuestión que en esa oportunidad además estuve de niñera de muchos grupos que llegaron a la tierra del churrasco verde. Y fue una experiencia maravillosa y agotadora.
Este año se vuelve a repetir en su sexta edición y uno de los muchos escenario donde los artistas muestran sus virtudes queda exactamente a 50 metros de mi casa suya de usté. Esta vez me toca de espectadora.
Si bien de repente me dan ganas de dormir sin música de fondo, he podido disfrutar en familia de conciertos/recitales al aire libre muy buenos. La semana pasada unos holandeses pusieron a bailar al barrio entero. Pero también he podido apreciar un tipo de madre del cual poco he hablado. La madre jipi o hippie, como gusten. Y ojo que no puse madre histérica jipi.
Chavas/mujeres jóvenes que vestidas con faldas guatemaltecas, guaraches de los que no se comen (o sea sandalias de cuero), rastas en el pelo algunas de ellas, aros largos con plumas coloridas, etc etc... ya se las imaginan? Tal como me vestía yo cuando nació el primogénito. Son las que van a los recitales con sus herederos chiquitos envueltos en rebosos, amarrados a la espalda.
Yo era hippie... antes. Porque después me volví una loca de los ruidos altos. O sea, ni el silencio absoluto ni el ruidero a todo volumen. Mientras pueda escuchar al que me habla esta todo bien.
Pero en estos lugares, suelen ponerle al máximo a la perillita y no son justamente los parlantes de la casa. Hablamos de unas mega bocinotototototas marca ACME y para mí es como si tuviera un radar directo al tímpano virgen de un heredero pequeñito.
Ergo nunca llevé a los enanos a ningún recital sino hasta que fueron más grandes. Ollin, el chino loco....(siiii se llama igual que el festival! ta, gracias! y se pronuncia con una sola L!!! cucharita cucharon al que lo llame Oshin!!!) se inicio a los 2 años y medio con la Catalina pero escuchándolos a lo lejos.
En cambio estas chicas, por lo visto no son tan locas sobreprotectoras como una servilleta, al menos en cuanto al sonido. Y van sin problemas con carreola/cochecito equipado con todas las provisiones listas. Cobijita, almohadita, leche, chamarra y hasta paraguas por si llueve. Tan relajadas como sólo ellas pueden estarlo. Tal vez se deba al atmósfera dulzona que se respira ;) a sus alrededores no lo sé... pero ahí van. Relajadas. Compartiendo el tiempo con los babys hippies, que desde peques escuchan world music.
8 comentarios:
Hola Madre histerica, lei tu blog y lo sigo desde la media sombra (deje un mensaje en diciembre, pero ya era viejo), me encantò y queria comentarte que, para mi las madres cambian con la edad... lamentablemente, cuanto màs joven mas..inconciente, si se quiere. No es lo mismo una madre de 20, 30 o 40. A mas años, mayor conocimiento (supuestamente) y por ende mayores miedos... pasa lo mismo con conducir un auto...aunque NO ES LO MISMO !!! :-)
Saludos
HOLA MH! Mira, a mi me paso algo por el estilo en el verano, que fuimos a un poblado que es desembarco de muchos nenes que se hacen hippies y, paterfinanciamiento de por medio, se van a vivir de la tierra a alguna de las tantas localidades serranas de mi provincia. Sin medicina, ni nada de esas cosas que provee la civilizacion y el capitalismo, pero ese es otro tema.
Pense lo mismo que vos, porque yo fui con mi bebe pero nos quedamos como a 70 metros del escenario, pero estas chicas estaban con los crios sentadas al lado de los parlantes.
Sera que la naturaleza les ampara los oiditos.
Un beso, para tus chicos, y para vos obvio
Ah, fui al festival del pueblo, habia musica folclorica, y comida casera, bajan todos los paisanos de las sierras con sus bombachas y sus boinas, y las alpargatas recien desempolvadas.
Hermoso!
¿Así que somos vecinos? Yo, por lo regular, los sábados y domingos me la vivo en la explanada delegacional con los retoños. Este sábado, pude escuchar a una cantante brasileira con una voz privilegiada, pero para mi gusto algo melosa.
Obvio, mis críos de 13 y 17 años, soportan mejor la música y se divierten más socializando que apreciando la oportunidad que ofrece el festival.
Anavril: Es que por suerte los años no vienen solos, traen sabiduría. pero no siempre eh? que conozco madre de 40 que se pasan de aprensivas.
Que bueno que te gusto el blog!!!
Maria: uuuh bueno los jipis mantenidos por papa rico me caen en la punta del higado!!!
Mmm comida casera qué rico!!! es que los festivales son super difrutables muchas veces...
Juliuss!!! asi que vecinos... y mirá que esta ciudad es grande eh?!
Ahora mismo estoy escuchando la prueba de sonido del parque ecologico... privilegiado lo mio.
Yo trabajo en el 547 de esa avenida, frente a las farmacias del ahorro, pero aqui me enclaustro todo el día.
De vez en cuando voy a la plaza a comer y a las mojarras de los viernes en las casitas, donde la chela helada es al 2 x 1.
Son los fines de semana cuando voy al Centro de Tlalpan, pues tengo familia allá.
Ahh madre histerica, mira, no estoy de acuerdo con esas madres modernas que llevan a los crios a discotecas, recitales y fiestas ruidosas...cuando los nenes no tienen ni cinco anos. Los nenes necesitan dormir y seguir su rutina. A mi no me parece. No creo que sea lo mejor.
Y opino por boca de jarro (bueno, soy argentina, es costumbre, vio?) porque si bien no tengo hijos, me acuerdo que mi mama me lo comentaba escandalizada!
Bandida: Usté opine que pare estamos! Coincido con tu madre...aunque al mio que tiene 4 lo he llevado a varios pero me quedo hasta el fondo donde el sonido es tolerable y pueden jugar a gusto sin molestar a otros oyentes.
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