Las madres histéricas podemos ser muy apegadas o no. Yo siempre me la pasé cacareando que era una de esas madres relajadas. Jamás una madre con ataques de ansiedad, manos sudorosas y ojos brillosos cuando el enano se fuera a casa de un amiguito o a un campamento.
Hoy pude comprobarlo. Estaba algo nerviosa, pero no temblaba de nervios. Estaba emocionada porque recordaba las veces que yo me fuí de campamento. Y verlo ansioso por querer irse con sus compañeros me dió la tranquilidad de saber que tan pior no lo hicimos, que es un niño seguro.
Y que seguro recibiré este tipo de llamada telefónica.
7 comentarios:
AY dIOS! COMO ME REI CON EL VIDEO DE YOUTUBE!!! GENIA!!!!
Eso está muy bien... Estar relajada. Para los hijos resulta muy incómodo saber que dejamos en casa a nuestros padres que se comen las uñas de nervios y preocupación.
Saludos
Lolita.
pues yo me iba feliz para los campamentos, aunque sabia que mis papas se quedaban deshechos de los nervios...
en un par de años te contare como lo hago de mama,
Que divertida la canciòn :D "serà por eso que el chofer se suicidò"
Me dieron ganas de escribir sobre mis campamentos, que fueron varios y muy divertidos.
bueno no se mis hijos se fueron de vacas una semana y no los extraño mucho, pero veremos que tanto dentro de dos días.
Hombre, mujer digo perdón, es que estban tan contentos con irse que me puse contento hasta yo o mi o como se diga.
el hecho vacas yo y mi mujer solos
bandida!!! tanto tiempo. Es que peccetti es lo máximo!
Lolita: es que los chicos son como esponjas...se dan cuenta de todo. la tiene re clara.
Lunafeli: yo tambien era de las que disfrutaba los campamentos al maximo... por eso me da tanta emocion que se haya ido tan feliz!
Pupo!!! qué paciencia tienen los choferes no???!! acá los niños cantan: apresurese chofer, apresurese chofer que lo viene persiguiento la mamá de su mujer!!! jajaja por eso manejan a mil!
Leo: esaaa es la otra parte padre de los campamentos... es sano mandarlos a otro lado un tiempito pa volver a estar solitos...no?
Jejejeje... es muy buena la letra, me trajo muchos recuerdos de mi primera excursión al Albergue del Ajusco.
Y como padre, cuando mis hijos se han ido de campamento, pues no queda otra más que apechugar y confiar en que germinará la semilla de buen juicio que algún día plantamos.
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