Así es. Mujer y punto. Por si no lo recuerdan, la maternidad es digamos que una de las formas que toman las mujeres. Y sólo es posible cuando la mujer opta, decide, elige (sin saber muy bien en lo que se esta metiendo) en crear vida dentro de su cuerpo. Y por añadidura se vuelve histérica, viene juntoconpegado.
Pero antes de todo eso la madre histérica, o sea yo y muchas más, fuimos mujeres. Cuando el lavado de cerebro llamado amor maternal (en especial con las primerizas) afloja un poco y empezás a ver con algo mas de claridad, recordás esa etapa en tu vida donde eras dueña de tu cuerpo, tu tiempo, tus sueños y además contabas con el libre albedrío para satisfacer tus necesidades a piacere. Entiendase necesidades cosas tales como:
- salir con tus amigas a tomar café, ir al cine o chusmear como dios manda
- tener un noche a la semana por poder ponerte peda en reunión con amigos de la facultad
- tener sexo más de una vez a la semana (dependiendo si estas en pareja y cuántos años llevas en pareja)
- ser dueña de un cuerpo sin pelos ni estrías ni kilos de más (algo súper importante antes de ser madre histérica)
- dormir los fines de semana hasta las 2 de la tarde
- no preocuparte si en la heladera no hay más que un yoghourt bajas calorías, una manzana, una cerveza y algún chocolate antidepresivo.
- ir de compras sin preocuparte por la hora en que los vástagos salen del edificio donde les enseñan a leer, escribir y sumar.
Estas son sólo algunas de las necesidades que con la maternidad se convierten en una batalla constante por un espacio donde realizarlas.
No es que reniegue de mi histéria, la proclamo a todas horas y en todos lados. La asumo con orgullo; lo cual no quiere decir que la brújula se vuelva loca y pierda el norte por completo. De ninguna manera. Yo reinvindico mi derecho a seguir siendo yo, mujer, individua, única, glamorosa, egoísta, superficial, rompecorazones y por sobre todo libre!!!
1 comentario:
estoy de acuerdo!
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